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REFLEXIONES
Reflexiones sanitarias
Dr.César Quintero Sánchez
Todas las semanas me pregunta mi familia, lo que me motiva a escribir sobre temas controversiales, diciendo cosas que todo el mundo sabe, que nadie quiere que le recuerden y que sin lugar a dudas acrecientan mi depósito a plazo fijo de enemigos. Creo que la respuesta es que todavía, gracias a Dios, abrigo la esperanza de que este país podrá salir algún día del subdesarrollo físico, moral e intelectual y que mi reflexión tal vez logre alcanzar a algún personaje objetivo y honesto con capacidad de decisión y entonces pueda corregirse o abrirse al debate, el asunto en referencia. Adicional a esto, estimo que no tengo por qué en plena Democracia del Tercer Milenio, poner mi lengua, mi pluma, en este caso mi dedo y mi cerebro en cuarentena. En el área de la formación de los recursos humanos del sector salud, yo me pregunto qué clase de correspondencia existirá entre lo que se enseña en las tres Facultades de Medicina y el perfil epidemiológico real de nuestros ciudadanos. ¿Cómo es posible que un catedrático fracase período tras período, a más del 50% de sus alumnos? ¿Quién es el deficiente en este caso y qué es lo que enseña?. ¿Qué clase de ejemplos observan nuestros estudiantes para que cada día la mística de la Medicina se vaya desvaneciendo entre los nuevos galenos? ¿Qué región organiza en forma sistemática giras sanitarias a todas sus comunidades? Es que nos hemos acostumbrado a que otros, nos las realicen o lo que es peor, desconocemos cuál es el espacio - población bajo nuestra responsabilidad directa. Hace un par de días tuve la oportunidad de leer un libro que trata sobre el significado real de la calidad, en nuestro caso de los servicios integrales de salud, que se supone debemos proveer a nuestras comunidades. El autor va desarrollando varias alternativas sobre las que hace girar la Administración en una empresa hipotética, en búsqueda de la Calidad, concepto sobre la cual nadie sabe cómo se define, pero todo el mundo expresa que la reconoce al verla. Del concepto del esfuerzo personal y colectivo, se pasa al obsoleto tema de la supervisión en grado superlativo, transitando por la adopción de un nuevo sistema basado en la Prevención. Ninguna de estas medidas es capaz de producir Calidad, hasta que finalmente el líder reconoce, que la causa básica de la existencia de cualquier empresa, es la satisfacción de las demandas y expectativas de los usuarios o clientes. Así es sin lugar a dudas en el área de la salud. En la medida en que nuestros dirigentes internalicen las verdaderas necesidades sanitarias y dirijan los recursos, actividades y procesos en esa dirección, sin buscar en los actores principales algunas otra seña, marca o atributo diferente a su conocimiento, capacidad, experiencia, compromiso, motivación y liderazgo, alcanzaremos la tan ansiada Calidad total en el sistema sanitario.
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