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Pinochet optó por la vía más segura y apeló sentencia de extradición
Agencias
Internacionales
Los abogados de Augusto Pinochet optaron por la vía jurídica más segura y este viernes depositaron su apelación contra la sentencia de extradición hacia España, prolongando así en varios meses la residencia forzada del ex dictador chileno en tierra británica. El viernes era la fecha límite para la presentación de un recurso contra la sentencia del tribunal londinense de Bow street. El juez estimó el 8 de octubre que en ningún caso, el octogenario, acusado de torturas por España podía evitar ser incriminado por la convención internacional contra la tortura. Por tanto, consideró el juez, su extradición reclamada por Madrid era inevitable. Los defensores de Pinochet, llegados a media mañana ante la Alta Corte para depositar sus recursos podían también elegir como estrategia renunciar al recurso para que el expediente fuera transmitido a la oficina del ministro del Interior, Jack Straw. Opción arriesgada que si bien podía resolverse en la liberación del "senador vitalicio" por razones de salud, podía terminar con una confirmación rápida de la sentencia de extradición y el envío del interesado a España. El gobierno chileno y el entorno del general retirado dudaron mucho antes de decidirse por la apelación. Si bien la estrategia es menos riesgosa que el envío del expediente al gobierno británico, tiene como inconveniente que Pinochet puede verse reducido a morir en su lecho de exilio. La Alta Corte de Londres que trató el asunto Pinochet, ya hizo referencia a los "varios meses" de procedimientos que serían necesarios para considerar la apelación. Sin embargo, el plazo habitual de seis a nueve meses podría reducirse, pues tanto la acusación como la defensa ya prepararon sus argumentos durante el paso del expediente ante otras instancias judiciales. Augusto Pinochet, si las circunstancias no cambian, festejará pues sus 84 años, el 25 de noviembre venidero en la residencia de Wentworth, en el sur de Londres, con su esposa y varios policías de Scotland Yard. Tendrá tiempo para preocuparse por las pocas posibilidades de éxito que se da en medios judiciales a esta nueva contraofensiva, aunque la legislación británica le concede aún varias opciones de apelación. Pero los tribunales se han mostrado implacables en los últimos meses con el ex dictador.
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