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Intensa vigilancia de volcán ecuatoriano por erupción
Agencias
Internacionales
Ante la aparente inminencia de una erupción del Tungurahua, expertos ecuatorianos intensificaron el jueves el monitoreo del volcán ante las señales de inestabilidad que siguen emanando de su interior. Según los expertos, el volcán sigue liberando presión por el cráter en forma de gases y ceniza, por lo que era necesario profundizar las observaciones. Pese al radiante sol del jueves, el Tungurahua pasó la mayor parte del día tapado por las nubes, lo que impedía apreciar de forma certera las deformaciones que ha sufrido su cráter. El Tungurahua, que en quechua significa Garganta de Fuego, se alza a 5.020 metros sobre el nivel del mar y desde el sábado las autoridades declararon una alerta naranja, por el notorio aumento de su actividad sísmica y lanzamiento de fumarolas. La alerta naranja significa la posibilidad de una erupción en cuestión de días o semanas. Los expertos estiman que en los últimos 3.000 años el Tungurahua registró 3.000 erupciones, la más reciente en 1918. Portando varios instrumentos de medición, el experto del Instituto Geofísico, Pablo Samaniego, y otro volcanólogo se desplazaron hasta una loma de la localidad de Cotaló para inspeccionar el comportamiento del Tungurahua. "El volcán sigue inestable, pero hay siempre la posibilidad de que venga una erupción súbita. Esperamos la erupción de manera imprevista, pero lo importante es que la gente ya ha sido evacuada", explicó Samaniego en entrevista con Reuters. El martes, la principal investigadora del Tungurahua, Patricia Mothes, dijo que la erupción podría ocurrir en breve, teniendo en cuenta el aumento de actividad. El gobierno informó que el lunes 25 llegará un grupo de expertos de Estados Unidos para asistir a las autoridades ecuatorianas en cómo reaccionar frente a la emergencia. "La colaboración se orientará al manejo logístico. El grupo realizará un estudio de posibles puntos de reabastecimiento y de rutas necesarias para la entrega de provisiones de emergencia", detalló el gobierno en un comunicado. Entre la población evacuada de los alrededores del Tungurahua, la desesperación comenzó a acentuarse por saber si el volcán erupcionará o no, luego de que fueran obligados a dejar sus casas el fin de semana. "No podemos estar viviendo con esta incertidumbre. Ojalá ya mismo reviente", declaró un campesino de la zona de Cotaló, quien tuvo que dejar a sus animales a raíz de la forzada evacuación. En una escala de 1 al 7, los expertos pronostican que la erupción del Tungurahua tendría nivel 3, teniendo en cuenta su historial, aunque ha registrado erupciones de nivel 1 ó 2. El Tungurahua es uno de los 31 volcanes actualmente activos en Ecuador. El ministro de Vivienda y jefe del comité de crisis por el Tungurahua, Teodoro Peña, sostuvo el jueves contactos con funcionarios de Naciones Unidas para dar asistencia a los más de 20.000 evacuados por la emergencia.
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