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La franquicia Kentucky Fried Chicken (KFC) de Colón, también formó parte de la lista de esos restaurantes de comida rápida que están siendo asaltados.
La noche del lunes, los delincuentes desarmaron al guardia de seguridad de ese restaurante al que obligaron a entrar al local, y adentro pidieron que abriera la caja registradora para llevarse el dinero.
Ese asalto lo cometieron por primera vez dentro del local ante la mirada de clientes, porque en otras oportunidades sólo se habían atrevido a quitarle el arma al seguridad.
Los clientes que estaban dentro quedaron tan preocupados como la comunidad que ya no sabe qué hacer con la delincuencia que se vive en Panamá.
No se dijo la cantidad de dinero que se llevaron los maleantes.
La Policía Nacional informó que mantienen bajo investigación a dos sujetos, y un arma de fuego, pero el dinero no apareció.
No se han dado capturas por ese hecho.
En la ciudad capital, en menos de un mes se registraron cuatro robos a los restaurantes KFC ubicados en la vía Tumba Muerto y en Plaza Conquistador, dos veces a cada uno.
De los mismos se llevaron más de 26 mil dólares en total.
Por esos delitos tampoco hay detenidos ni sospechosos. ¿Qué está pasando?
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