Unas setenta personas, en su mayoría escolares, sufrieron ayer lesiones con gases irritantes, que lanzó un joven de 16 años en una escuela de Kirchzarten, en la Selva Negra alemana, en el sur del país.
Unos cuarenta escolares tuvieron que ser atendidos por los equipos de salvamento, en el mismo lugar de los hechos, mientras otros 32 fueron ingresados en un hospital.
El presunto agresor fue detenido y puesto a disposición judicial para ser interrogado, ya que por el momento se desconocen los móviles de su acción.
Según parece, los gases irritantes fueron lanzados en un corredor entre dos dependencias de la escuela, donde se imparten cursos de formación profesional.