A partir del 1 de enero del próximo año todos los operadores de embarcaciones de cualquier longitud, deberán portar licencias de marinos de aguas internacionales y de motor fuera de borda, además de cumplir con las normas de seguridad, señaló Raúl Antonio, funcionario de la Autoridad Marítima de Panamá (AMP).
Antonio explicó que para la expedición de las licencias las personas tendrán que llenar los requisitos, entre los que se incluyen la solicitud de operar en aguas internacionales, dos fotos carnets, copia de cédula o pasaporte, certificado médico y de entrenamiento, entre otros documentos, destacando que el permiso tendrá un valor de B/.2.00 y vencerá cada tres meses.
Sostuvo que el Sistema Nacional de Protección Civil (SINAPROC) apoyará en la supervisión de seguridad, además del Servicio Marítimo Nacional (SMN), ya que la AMN les ha autorizado para llamar la atención y sancionar a los que incurran en faltas a estas disposiciones.
Por su parte, Celso Santamaría, presidente de la cooperativa de boteros de Isla Grande, destacó que en la actualidad algunos propietarios de hoteles del área no les brindan el apoyo necesario, ya que en su mayoría son ellos los que trasladan a los clientes.
La información fue brindada por Antonio durante una reunión donde participaron más de 60 operadores de bote de la cooperativa de Isla Grande, evento que contó con la participación de funcionarios de Migración, SMN, Cuarentena Agropecuaria, Sanidad Marítima, Planificación de Salud y del SINAPROC. |