La policía española sabía que Tony King era un delincuente sexual ex convicto que vivía en España. El ministro del Interior, Ángel Acebes, ha admitido que en 1998 la Policía británica alertó de la presencia de King, de que éste tenía antecedentes y de que se trataba de un sujeto potencialmente peligroso para las mujeres. Un año después, en octubre de 1999, moría en España su primera víctima, Rocío Wanninkohf.
Acebes confirmó que en 1998 se produjeron varias comunicaciones de la policía británica a la española, a través de Interpol, en las que informó de algunos antecedentes de King en el Reino Unido relativos a agresiones sexuales a mujeres.
La policía española comprobó la presencia del británico, pero no procedió a arrestarle. |