Tres hermanos murieron acostados en la misma cama, uno al lado del otro.
Cristian Antonio Sáenz, de 8 años; Angelo Emanuel, de 3 años, y Anthony Emanuel Escobar, de 1 año, fallecieron en la tarde de ayer viernes, sepultados por un derrumbe de tierra que cayó encima del cuarto de alquiler No.7, en Altos del Sol, en Roberto Durán, San Miguelito.
La lluvia se inició a la 1:00 de la tarde, en San Miquelito. La madre de los menores -Bélgica Madrid- había ido a buscar a su hijo de 8 años a la escuela primaria, en Santa Librada.
Los niños llegaron al cuarto y se acostaron a descansar. En otra habitación estaban la abuela -Nivia Inés Rodríguez de Madrid- y la niña de 11 años, Zuleyca Rachel Blandón, sobrevivientes al derrumbe.
La madre salió a llamar a su esposo a la tienda, y al regresar vio la tierra que había caído en el cuarto donde estaban sus hijos.
Waldo Pérez, vecino, dijo a "Crítica" que no se oyó ningún ruido, pero por lo fuerte de la lluvia salió a ver cómo estaba el cerro de atrás, y su sorpresa fue al escuchar los gritos desesperados de su vecina que decía que sus hijos estaban dentro de la casa.
Unieron fuerzas y mientras llegaban las autoridades, empezaron a sacar la tierra con palas. Cuando el equipo de rescate llegó, los niños estaban muertos.
Parte de la tierra cayó encima del techo de la casa y la pared cayó sobre el cuarto donde estaban los tres hermanitos.
El niño de 8 años estaba acostado al lado de su hermano de 1 año, como cubriéndolo con sus brazos; el pequeño de tres años estaba un poco más apartado producto del golpe.
LAS VICTIMAS
La madre dijo que sus hijos eran niños muy alegres que a diario jugaban juntos. Solicitó que a sus pequeños no se les haga autopsia "porque los tres murieron como ángeles y así los quiero recordar".
CRUEL DESTINO
Horas antes a la desgracia, personal del SINAPROC y la Alcaldía había ido a Altos del Sol y había advertido que era peligroso que vivieran en el lugar porque las lluvias podían causar muchos daños.