Residentes de la barriada San Juan, en La Chorrera, ubicada en la parte de atrás del Hospital Nicolás Solano, están temerosos y es que una residencia, que fue abandonada por sus propietarios, se ha convertido en la "guarida" de delincuentes.
No sólo se ha desvalijado en su totalidad la residencia, sino que el monte que crece en los alrededores se ha convertido en una pesadilla para los transeúntes, que no pueden ni siquiera darse cuenta cuando los maleantes están en los alrededores.
Los residentes de la barriada San Juan y las comunidades aledañas piden a las autoridades hacer algo al respecto, antes de que suceda una desgracia.
También hacen un llamado a la Policía Nacional para que redoble la vigilancia en el lugar y se capture a estos delincuentes que están al acecho de sus víctimas.