Una de las muchas preocupaciones de la mujer durante la época de la lactancia es la anticoncepción eficaz que no afecte la cantidad y calidad de la leche.
Se estima que un número significativo de mujeres quedan embarazadas nuevamente durante el conocido período de "cuarentena" y los seis a doce meses recomendados de lactancia debido a que utilizan métodos anticonceptivos poco eficientes o no se usa ninguno por temor o desconocimiento.
En la actualidad existen anticonceptivos hormonales inyectables que pueden ser usados inmediatamente después del parto, siempre y cuando no existan objeciones médicas que el especialista determinará según el historial de la paciente.
Noristeratâ, de la compañía farmacéutica Schering Centroamericana, es uno de ellos y acaba de ingresar a nuestro mercado para su venta en farmacias.
Este medicamento --disponible en más de 60 países del mundo-- estará en el mercado centroamericano desde este mes.
La primera inyección intramuscular se aplica en cualquier momento del período de lactancia y, luego, cada dos meses. Es importante que durante la lactancia la mujer no presenta una menstruación regular, por lo que es aconsejable que consulte con su médico el mejor momento para aplicarse la inyección.