En el mes de abril de 1969 se produjo el desbordamiento del Río Caldera en Boquete, provincia de Chiriquí, produciendo cuantiosos daños en la población. Estos daños fueron de pérdidas materiales y de vidas humanas. Al producirse la tragedia, el gobierno de aquel entonces organizó la movilización de un equipo para atender a los miles de damnificados en la más severa inundación que recuerdan los boqueteños.