La selección española prolongó ayer su estado de gracia goleando con una aplastante superioridad a Armenia (4-0), plasmando su estilo de juego con toque y velocidad, al ritmo de Andrés Iniesta, culminado con la pegada letal de David Villa, para sumar su segundo triunfo en el camino al Mundial 2010.
El regreso a casa de Iniesta acabó en exhibición del chico de Fuentealbilla. Aclamado en el Carlos Belmonte desde que pisó el césped, dirigió el vistoso fútbol de la roja, que goleó y divirtió a una afición entregada.
Iniesta regresaba al escenario de su debut dos años después, con una Eurocopa a sus espaldas y un crecimiento vertiginoso. Ya es indiscutible en el Barcelona y la selección. Con la roja dio el salto de calidad el 7 de febrero de 2007. Se doctoró en Old Trafford. En el teatro de los sueños. Desde entonces, nadie ha osado a quitarle la titularidad. Con partidos como el de hoy es tarea imposible.
Vicente Del Bosque cuenta sus partidos por victorias. Tres de tres y extensión de la imagen de la Eurocopa. Esta vez jugó al despiste con el once y el esquema. Finalmente apostó por dos delanteros ante el temido cerrojazo armenio, que no fue tal, y Güiza fue titular. Ni el jerezano lo esperaba.
Ayer los errores ante Bosnia, fueron cosa del pasado y se corrigieron con rapidez.
EL JUEGO: FICHA
Goles: 1-0, m.7: Capdevila. 2-0, m.16: Villa. 3-0, m.78: Villa. 4-0, m.82: Senna. Estadio: Carlos Belmonte, lleno, con 18 mil aficionados en las gradas.