CRITICA EN LINEA 

 

S E C C I O N E S

EPASA EN LINEA

PANAMA AMERICA

DIAaDIA EN LINEA

REVISTA SIETE!


primera plana

portada

al cierre

nacional

política

opinión

el pueblo habla

provincias

nuestra tierra

deportes

el mundo

viva

sucesos

 

CRITICA
 
FAMILIA
  OPINIÓN


¿Un cielo aburrido?

Hermano Pablo | Reverendo

Era el año 1828 en la ciudad de Santa Fe de Bogotá. Hubiera preferido mil veces permanecer callada, pero se veía obligada a romper su silencio. Así que mojó la pluma en la tinta y comenzó a escribirle a su esposo británico una carta que resultaba difícil por su franqueza, pero que a la vez era fácil porque le salía de las entrañas:

"¡No, no, no más, hombre, por Dios! ¿Por qué hacerme usted escribir, faltando a mi resolución? Vamos, ¿qué adelanta usted, sino hacerme pasar por el dolor de decir a usted mil veces no? Señor, usted es excelente, es inimitable; jamás diré otra cosa sino lo que es usted. Pero, mi amigo, dejar a usted por el general Bolívar es algo; dejar a otro marido sin las cualidades de usted, sería nada.

"...Yo sé muy bien que nada puede unirme a él bajo los auspicios de lo que usted llama honor. ¿Me cree usted menos honrada por ser él mi amante y no mi esposo? ...

"Déjeme usted, mi querido inglés. Hagamos otra cosa: en el cielo nos volveremos a casar, pero en la tierra no... Allá todo será a la inglesa, porque la vida monótona está reservada a su nación.... El amor les acomoda sin placeres; la conversación, sin gracia, y el caminado, despacio; el saludar, con reverencia; el levantarse y sentarse, con cuidado; la chanza, sin risa. Éstas son formalidades divinas; pero yo, miserable mortal, que me río de mí misma, de usted y de estas seriedades inglesas, ¡qué mal que me iría en el cielo!"

¿Cómo se explica que la patriota quiteña Manuela Sáenz tuviera semejante concepto del cielo? ¿Acaso influyó en ella el tiempo que pasó encerrada el convento de monjas de Santa Catalina? Tal vez pensara que el cielo era como ese monótono convento.

Lo cierto es que aquella esposa del doctor James Thorne y amante del general Simón Bolívar desconocía las Escrituras y el poder de Dios. En el mundo venidero -les dijo Jesús-, los hijos de Dios "no se casarán ni serán dados en casamiento, ni tampoco podrán morir, pues serán como los ángeles." Con esas palabras Cristo dio a entender que el poder de Dios es tal que el cielo superará a la tierra en todos los sentidos. Lejos de lo que pensaba Manuelita, allá la vida no será aburrida sino divertida. Lo irónico del caso es que a la Libertadora del Libertador le pudo haber ido de lo mejor en el cielo, pues no hay mayor libertad que la que allí nos espera.



OTROS TITULARES

USS Alabama en Gatún

Sin embargo, temo a la responsabilidad

Abogados: auxiliares de la justicia

Detalles

Buzón de los lectores

¿Un cielo aburrido?

Asamblea y fiscalización

 


 

  





linea
linea gris
 

   copyright © 1995-2007, CRITICA EN LINEA
todos los derechos reservados