Alexander Castillo, un barbero reconocido en Colón por su responsabilidad y amabilidad, sorprendió a todos cuando decidió quitarse la vida ahorcándose.
La mala noticia la recibieron sus familiares, cuando lo encontraron colgando de una soga en la sala de la casa.
Este hecho ocurrió en la comunidad de El Progreso, cercano al sector de San Martín, un lugar poblado en su mayoría por gente del interior que vino a vivir a Colón.
Autoridades del Ministerio Público y la Policía, a través de la Subdirección de Información e Investigación Policial, llegaron al lugar para iniciar las investigaciones.
Algunos vecinos dijeron que Alexander era tan buena gente y chistoso, que le habían puesto el sobrenombre de "Peligroso", por eso no creían que se quitó la vida.
Se cree que el barbero tomó esta decisión porque estaba enfermo de los riñones.