Un incendio se propagó rápidamente consumiendo viviendas y comercios después que las autoridades evacuaron más de la mitad de este antiguo pueblo minero de 3.550 habitantes.
Los residentes que salieron el martes por la noche con pertenencias mínimas fueron informados el miércoles que serían autorizados a regresar durante el día después que los bomberos terminaran de talar algunos árboles para disminuir la amenaza. "Nuestro objetivo fue mantener el fuego donde está", dijo el subjefe del Departamento Forestal de California, Del Walters. |