Irving Saladino confiesa que no le gusta que le llamen "El Canguro", ya que ese animal salta con las dos patas al mismo tiempo y con las manos en posición encogida al momento de impulsarse. Yo, al momento de saltar, tengo una técnica: "lo hago con un pie y mis brazos hacia arriba para tomar impulso".
El campeón mundial de salto largo que se perfila para darle a Panamá su primera presea dorada en unas Olimpiadas, hizo esa revelación durante una entrevista concedida a periodistas de PanDeportes.
Quisiera que se me respete y pido el favor que me dejen de llamar así, "llámenme por mi nombre o el campeón, cualquier cosa, menos "El Canguro". Además, aquí en Panamá no hay canguros", insistió el atleta.