Cuatro militares estadounidenses -que pasaron un tiempo en Afganistán- asesinaron a sus esposas y dos de ellos se suicidaron recientemente en la base de Fort-Bragg, en Carolina del Norte, informó el Comando de operaciones especiales del Ejército de Tierra.
Los asesinatos sucedieron entre el 11 de junio y el 19 de julio en la base cercana a Fayetteville. Una de las esposas murió estrangulada, otra apuñalada y las otras dos por disparos. Dos de los militares se suicidaron inmediatamente después de matar a su cónyuge.
En el primer caso, los cadáveres abaleados del sargento Rigoberto Nieves, de 32 años y de su esposa, Teresa, fueron hallados el 11 de junio en su hogar cerca de la base. En otro incidente, la esposa del sargento William Wright, de 36 años, fue estrangulada.
Después, se encontraron los cadáveres del sargento Brandon Floyd, de 30 años, y de su esposa Andrea, también abaleados. En el cuarto incidente, el sargento Cedric Griffin, de 28 años, fue acusado de apuñalar más de 50 veces a su esposa Marilyn y después incendiar su casa. |