El presidente cubano, Fidel Castro, agradeció ayer a los legisladores norteamericanos por votar a favor de autorizar los viajes de estadounidenses a Cuba, en contra del deseo de la Casa Blanca.
El levantamiento de esas restricciones a los viajes, que el gobierno de Washington quiere mantener en pie, es un objetivo clave para Cuba, cuya economía depende del turismo.
"Siempre estaremos reconocidos de ese gesto", dijo Castro en un discurso para conmemorar el asalto al cuartel Moncada hace 49 años, la primera acción armada contra la dictadura de Fulgencio Batista.
La Cámara de Representantes votó el pasado martes a favor de permitir los viajes de norteamericanos a Cuba, lo que supondría una importante modificación del embargo que Washington mantiene desde hace más de cuatro décadas sobre la isla caribeña.
Es la tercera vez que la cámara aprueba una medida similar, aprobada también por el Senado, pero que sin embargo es luego bloqueada por la Casa Blanca. |