El tribunal que juzga a Slobodan Milosevic tuvo ayer una jornada negra para la Fiscalía, que vio cómo su testigo, un antiguo alto cargo del régimen serbio, se pasaba a apoyar las tesis del acusado.
El ex jefe de la Seguridad del Estado Radomir Markovic, negó que hubiera un plan de "limpieza étnica" en Kosovo, ordenado por Milosevic. El ex presidente yugoslavo está acusado por la matanza de al menos 900 albano-kosovares y la deportación de otros 800.000. |