La ola delictiva que sufre el país, no sólo se circunscribe a las áreas urbanas o comerciales; la situación también es crítica en las zonas agrícolas.
Productores de plátano de Barú han manifestado su preocupación, ya que amigos de lo ajeno se dedican a cortar los cultivos de las plantaciones en horas de la madrugada, para luego venderlos a precios sumamente bajos.
Fernando Moreno, productor de la comunidad de San Pedro, indicó que hace pocos meses, unos antisociales le hurtaron 800 plátanos de su finca. Moreno indicó que sólo pudo recuperar a 800 metros de su propiedad un pequeño porcentaje del producto que le fue hurtado.
"Los antisociales entran por los atajos, cruzando ríos y quebradas para robar", señaló.
Explicó que los productores venden el ciento de plátano a 15 dólares a los intermediarios; sin embargo, de manera irresponsable algunos prefieren comprar el producto a cinco dólares, aunque sea hurtado.
Esta situación les representa pérdidas; debido a que pierden la oportunidad de obtener ganancias. Más aún cuando la producción de plátano no pasa por su mejor momento, debido al elevado costo de los insumos y por los efectos de las inclemencias del tiempo meses atrás.
En esta región, más de mil productores se dedican al cultivo de plátano en unas 3 mil hectáreas; razón por la cual solicitan a las autoridades de Policía que se efectúen rondas de manera seguida para minimizar este delito que también entorpece el normal desarrollo de la producción.