Los hogares y los negocios en Panamá amanecieron hoy con un alza en la tarifa de electricidad. Este es otro zarpazo a la economía del pueblo y origina desbalances en los presupuestos de muchas empresas.
El incremento que se mantendrá vigente por seis meses será de un poco más del dos por ciento para los usuarios residenciales y de 7.55 por ciento al sector industrial y comercial.
Ni el subsidio de B/.6 millones aportado por el gobierno de turno sirvió para evitar el incremento, que se origina por el aumento que ha registrado el precio del petróleo en los últimos meses.
El precio de la gasolina de enero de 2003 a junio de 2004 pasó de B/.1.65 por galón a B/.2.45. Un porcentaje de la electricidad que se utiliza en Panamá es generada por plantas térmicas que utilizan combustibles. El resto es producida por las hidroeléctricas.
En la práctica el aumento lo asumirá en doble tanda el pueblo panameño, ya que será golpeado con el alza en la tarifa de lo que consume en su hogar y la mayoría de los comercios trasladarán a los consumidores el incremento que se les aplica a sus negocios.
¿Qué puede hacer el panameño?. Poco. Lo mejor es tratar de disminuir el consumo de energía para mermar el impacto del alza. Cambiar los bombillos incandescente por fluorescentes, evitar mantener encendida innecesariamente la televisión, así como reducir los días de planchado la ropa y el uso de las lavadoras, son algunas opciones.