"¿Explicaciones? Hablen con Carlos Queiroz". Esta fue la escueta reacción a la eliminación lusa frente a España de la estrella de Portugal, Cristiano Ronaldo, cuya figura levantó un debate en su país natal sobre su papel como capitán.
Miembros de la selección portuguesa y los aficionados lusos se mostraron sorprendidos por el comportamiento de Ronaldo tras el encuentro del martes, cuando declinó hacer manifestaciones a la prensa alegando "estar en caliente".
No obstante, el capitán de la selección emitió un comunicado poco tiempo después de su polémica intervención para justificar su comportamiento.
"Estoy destrozado, completamente desolado, frustrado y con una tristeza inimaginable", dijo, y recordó que como capitán siempre asumió y asumirá sus responsabilidades, "pero en ese momento no conseguiría decir más que tres o cuatro frases lúcidas".
Luis Figo, antiguo símbolo de la selección portuguesa, declinó comentar las declaraciones de Ronaldo, aunque enumeró las características que debe de tener un capitán.
"Para mí, un capitán, independientemente del fracaso o éxito, debe siempre defender el grupo, independientemente de salir perjudicado en términos de imagen, y, sobre todo, debe en los momentos difíciles dar la cara por el grupo", valoró el ex capitán portugués.
Los medios portugueses también recogieron la controvertida reacción del astro del Real Madrid y algunos diarios explicaron su comportamiento por "el mal perder" del futbolista, que completó un Mundial discreto.
Entre sus compañeros prevaleció la imagen de unidad y el medio Tiago fue uno de los pocos que comentó las manifestaciones de su capitán.
"Salimos de aquí todos juntos y estamos dando la cara. Somos un grupo. No habló el capitán, pero están aquí otros jugadores", dijo.