Es imprescindible por la seguridad de la vida de más de un centenar de personas, el desalojo de las orillas del río Risacua en la ciudad de David, ya que con la entrada de la temporada de lluvia éstas se tornan peligrosas por la crecida del cauce.
El fin de semana fueron atendidos de urgencia una gran cantidad de indígenas que permanecen allí, pues el río subió enormemente su caudal.
Francisco Vigil, alcalde del distrito de David, apuntó que de parte del municipio se han hecho evaluaciones a fin de buscar una solución, pero advirtió que deben ser las autoridades de la comarca, las que deben intervenir en la consecución de las respuestas. Pero aseguró que hay que ser muy cuidadosos en estos casos.