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CONSULTORIO
El tratamiento de la osteoartritis

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Dr. H.R. Hiller

Estimado Dr. Hiller: Padezco de artritis en las rodillas, y los medicamentos que tomo no me ayudan lo suficiente. Hace unos años estuve visitando a un amigo en Canadá y recuerdo que su vecina estaba recibiendo inyecciones de un medicamento que se suponía le ayudaba a renovar el fluido en sus rodillas. ¿Está disponible este tratamiento en los Estados Unidos?

Estimado lector: La sustitución de fluidos a que hace referencia, también llamado viscosuplemento, se inyecta directamente dentro de la articulación para ayudar a disminuir el dolor y para aumentar la movilidad en aquellas personas que padecen la osteoartritis. Dos viscosuplementos Synvisc e Hyalgan, están disponibles en los Estados Unidos para el consumo en enfermos con rodillas osteoartríticas que no han obtenido ninguna mejora apreciable en intervenciones no quirúrgicas.

En la osteoartritis, algunas veces llamada enfermedad degenerativa de las articulaciones, el cartílago y los fluidos sinoviales que amortiguan y lubrican las articulaciones se deterioran. Normalmente, el dolor que esto produce limita los movimientos y deja rígidas las articulaciones. La movilidad de las articulaciones se reduce algunos grados en aproximadamente el 80% de los que padecen osteoartritis.

En los Estados Unidos, la osteoartritis afecta a cerca de 21 millones de personas y provoca unas 7 millones de visitas al médico anualmente. Es más frecuente en las mujeres que en los hombres, la enfermedad puede surgir en adolescentes y jóvenes aunque la mayoría de las veces afecta a personas con edades que rebasan los 45 años. El desarrollo de la osteoartritis se ve acelerado por la obesidad, la cual produce un exceso de presión sobrel as articulaciones. Accidentes laborales, deportivos o contusiones pueden también contribuir al desarrollo de la enfermedad.

Fármacos antiinflamatorios no esteroideos (AINES) tales como el ibuprofeno o naproxea son a menudo la primera medida que se usa para reducir el impacto de la osteoartritis. Los nuevos AINES llamados COX-2 inhibidores quizá proporcionen una mejoría similar a las de los tradicionales AINES aunque con pocos efectos secundarios gastrointestinales. El primer COX-2 inhibidor a la venta en los Estados Unidos, celecoxib (vendido como Celebrex), recibió la autorización de la Agencia de Fármacos y Alimentos (FDA en inglés) el 31.12.98. Otro inhibidor Cox-2, rofecoxib (en el mercado con el nombre de Vioxx), tal vez reciba la aprobación de la AFA este mismo mes. Calmantes del dolor tales como el acetaminofeno, muy eficaz como terapia física, inyecciones de esteroideos y pérdidas de peso, puede que también ayuden a aliviar el dolor y a mejorar el funcionamiento de las articulaciones. Si las medidas más tradicionales fallan pronto, la opción final debe ser el reemplazamiento de las articulaciones.

Aunque no es en sí la cura definitiva, la viscosuplementación supone una opción más a considerar antes de recurrir a la cirugía. Los viscosuplementos ha sido prescritos más a menudo que los fármacos porque sus métodos de acción son más mecánicos que químicos.

La ventaja de esta técnica se que restablece las propiedades protectoras, lubricantes y de reforzamiento de los fluidos de las articulaciones (sinovia). Los suplementos parece que no interfieren con la medicación oral, así que pueden ser tomados junto con fármacos comúnmente usados para detener el dolor de la artritis.

Aunque los viscosuplementos han sido utilizados en Canadá desde 1992, no estuvieron disponibles en los Estados Unidos hasta 1997. Los dos viscosuplementos normalmente disponibles contienen hialoronan, el mayor componente que naturalmente se desarrolla en la sinovia, el cual se degrada y disminuye en la osteoartritis. Los suplementos son administrados como una serie de tres a cinco inyecciones durante una semana. Una semana de tratamiento con dichos fluidos cuesta entre 500 y 750 dólares, sin incluir el coste de la administración.

Los efectos secundarios asociados con Synvisc o Hyalgan normalmente se limitan a inflamaciones durante un corto período de tiempo, sensación de dolor, hinchazón y enrojecimiento. Desde que el hialoronan de esos compuestos es extraído de los pájaros, los enfermos deben advertir a su médico si padecen cualquier tipo de alergia a los pájaros o a cualquier producto de éstos. La efectividad del Synvisc fue probada en una investigación a la que se sometieron 110 enfermos que fue dirigida por Manfred Wobig, un médico alemán. Wobig descubrió que después de haber transcurrido 10 semanas tras la última inyección, el 56% de los enfermos que recibieron Synvisc padecían menos dolores al cargar con peso, comparados con el 13% de aquéllos que recibieron inyecciones de salina (placebo). Hubo una pequeña o nula disminución de la actividad en el 60% de los que se inyectaron Synvisc, comparados con el 17% de los que recibieron inyecciones de placebo. Las conclusiones de este estudio fueron publicadas en los números de Mayo y Junio de 1998 de la publicación especializada "Terapéuticas Clínicas".

Los autores de un artículo publicado en el número de Noviembre de 1998 de la publicación especializada "The Journal of Rheumatology" informaron que el Hyalgan era mejor que un placebo, y al menos tan eficaz como el naproxen, en cuanto a aliviar el dolor de la osteoartritis de rodilla. El artículo se basaba en las conclusiones de un experimento de 26 semanas dirigido por el doctor Roy Altman de la Universidad de Miami. Los 333 pacientes que participaron en la investigación recibieron inyecciones de Hyalgan, naproxen por vía oral o inyecciones de salina (placebo), y a todos se les permitió tomar acetaminofeno si lo deseaban. Antes del tratamiento, el promedio de dolor después de caminar unos 16 metros fue calificado entre 54 y 55 (en una escala de 100) por cada grupo. A la vigésimo sexta semana, esos valores descendieron en el 67% de los que tomaban Hyalgan, el 61% de los que tomaban naproxen y el 56% de los que recibían placebo. Los valores de ese promedio de medidas de dolor tras caminar del Hyalgan y de los grupos que tomaban placebo eran similares o muy próximos (aproximadamente un punto) y a medida que pasaban las semanas se distanciaban: dos, cuatro, cinco, seis, 12 y 16.

Aunque las conclusiones no siempre son espectaculares, la mayoría de las investigaciones afirman que viscosuplementos tales como el Synvisc y el Hyalgan son un método seguro para controlar el dolor de la osteoartritis. Así como ocurre con otros tratamientos, no suponen una mejora para todos los pacientes, y algunos estudios han sugerido que los enfermos que padezcan la enfermedad en un estado menos avanzado se beneficiarán más que el resto. Las próximas investigaciones quizá ayuden a determinar más claramente cuáles son los enfermos que se beneficiarían más con los viscosuplementos.

La osteoartritis es la causa más común de las 100 variantes de la artritis. A mucha gente con dolores crónicos de articulaciones se le disuade de consultar al médico porque creen erróneamente que la artritis es una causa inevitable del envejecimiento y que no puede hacerse nada para curarla. En muchos casos, el mayor daño se produce durante los dos primeros años de enfermedad, por lo que los enfermos no deben esperar a que el dolor y la discapacidad de las articulaciones se conviertan en algo insoportable antes de buscar ayuda médica. Una diagnosis y un tratamiento rápidos son esenciales para disminuir la carga de dolor que supone la artritis a corto y largo plazo.

 

 

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La osteoartritis es la causa más común de las 100 variantes de la artritis. A mucha gente con dolores crónicos de articulaciones se le disuade de consultar al médico porque creen erróneamente que la artritis es una causa inevitable del envejecimiento y que no puede hacerse nada para curarla. En muchos casos, el mayor daño se produce durante los dos primeros años de enfermedad, por lo que los enfermos no deben esperar a que el dolor y la discapacidad de las articulaciones se conviertan en algo insoportable antes de buscar ayuda médica. Una diagnosis y un tratamiento rápidos son esenciales para disminuir la carga de dolor que supone la artritis a corto y largo plazo.

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