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FAMILIA
Segunda
oportunidad para los jóvenes delincuentes
Tomado de China Libre
En los casos
más serios, después de evaluar el informe del oficial
encargado de vigilar la libertad condicional, el juez decidirá
en torno a uno de los cuatro niveles de castigo: (anteriormente
mencionados) sesiones de orientación de fin de semana,
libertad condicional, reformatorio o prisión.
Según Hung, se hace siempre énfasis en la rehabilitación.
Por ende, el castigo no es considerado como el método
más adecuado para transformar a los jóvenes delincuentes
en miembros que contribuyan con la sociedad. "Siempre los
tratamos como si fueran nuestros hermanos o hermanas menores",
dice Hung. "Dedicamos mucho tiempo enseñándoles
la importancia de obedecer la ley. Como todos, ellos pueden recuperarse
de sus errores".
La Corte Juvenil de Taipei también tiene una atmósfera
más amistosa y educativa que una corte criminal de adultos.
Durante la audiencia, los padres o tutores de un ofensor, así
como un asistente asignado por la corte, tienen la oportunidad
de expresar sus opiniones con respecto al caso. No se permite
que el público esté presente.
Wellington L. Koo, abogado y profesor de derecho de la Universidad
de la Cultura China en Taipei, cree que la corte juvenil debe
incluso ser separada de la corte de adultos y trasladada a un
edificio separado. Como ejemplo, él cita a Japón,
donde existen una corte familiar y una corte juvenil en un edificio
separado con una atmósfera más orientada a la familia.
"Pero cualquiera que entra en el edificio de una corte de
distrito de Taiwan siente la solemnidad y frialdad del lugar",
dice Koo. "Uno incluso puede ver a un criminal con esposas
y grillos. Esta atmósfera puede asustar a un joven. No
es justo permitir que pasen por esta clase de experiencia".
Koo también cree que las cortes juveniles deben dar más
énfasis en entablar un diálogo entre el juez y
el joven, en vez de tener al juez sencillamente dando una lección
y dictando una sentencia.
Los oficiales que vigilan a los que están en libertad
condicional juegan un papel vital en el sistema de justicia juvenil,
ya que son responsables de orientar y aconsejar a sus acusados
durante el período de observación, que puede durar
de seis meses a tres años. Sin embargo, el Juez Hung Chang-hung
dice que haya una severa falta de oficiales encargados de la
libertad condicional, con solamente diecinueve oficiales trabajando
para la Corte Juvenil de Taipei, Cada uno de ellos tiene que
asumir una pesada carga de trabajo, manejando alrededor de 120
casos al mes, sin incluir el trabajo de orientación adicional
los fines de semana y las investigaciones antes de una audiencia.
Para ayudar a rebajar la carga, la corte también tiene
más de cien oficiales encargados de la libertad condicional
voluntarios.
Los delincuentes cuyos casos son demasiado serios como para
ser puestos en libertad condicional, son enviados a uno de los
tres reformatorios de Taiwan, en Taoyuan, Changhua y Kaohsiung.
Cada reformatorio acomoda alrededor de quinientos delincuentes
juveniles, y el de Changhua acepta tanto varones como mujeres.
Si bien los reformatorios ponen énfasis en el orden,
la disciplina, la cohesión social y el cultivo de buenos
hábitos en la vida, su función principal es ofrecer
educación básica en los niveles de secundaria básica
y superior, así como entrenamiento vocacional en campos
como la mecánica automotriz, tipografía y diseño
gráfico. Los reformatorios también ofrecen orientación
individual y colectiva.
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