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En medio del festejo preparado por la Policía Nacional, los recién casados se dieron almismo tiempo, un beso. ¡Suerte para todos!.  |
Cinco parejas conformadas por unidades de la Policía Nacional y civiles, después de años de espera, cumplieron ayer uno de sus sueños más anhelados: unieron sus vidas en santo matrimonio.
Se trata de miembros de la institución que por años vivieron con sus parejas en matrimonio bajo la vista de las leyes terrenales y que por razones de presupuesto o de tiempo, no habían podido casarse por la iglesia.
Pero, a través de la oficina de Trabajo Social de la Policía, estas felices parejas pudieron concretar sus más anhelados sueños de unión matrimonial, pero a la buena: bajo el amparo y la venia del todopoderoso.
Todo se realizó ayer en una ceremonia oficiada por el arzobispo José Dimas Cedeño, en la Basílica Don Bosco.
Los bendecidos fueron: Carlos César Cedeño y la sargento Lisbeth de Cedeño - llevan 19 años casados por lo civil-; el sargento Gaspar Martínez y Silca de Martínez, que tienen dos hijos y 11 años casados por lo civil.
El matrimonio por la Iglesia incluyó a Silverio Ortega y la sargento Zurita de Ortega -dos años de casados por lo civil-; así como al cabo 1ro Arcelio Alfonso y Omaira Concepción, al igual que el Cabo 2do Alfredo González y la cabo Jessenia Forrero, 3 años casados por lo civil, con dos hijos. |