Vilma Espín, esposa del presidente interino de Cuba, Raúl Castro, murió a los 77 años luego de una larga enfermedad, indicaron medios estatales de la isla.
Espín era la presidenta de la Federación de Mujeres Cubanas y ejerció un papel influyente en el gobierno desde el triunfo de la revolución.
Según la agencia de noticias Prensa Latina, el gobierno cubano declaró un día de duelo oficial.
Un comunicado de La Habana indica que el cuerpo de Espín será cremado y las cenizas se depositarán, en ceremonia estrictamente familiar y con honores militares, en un mausoleo en la provincia de Santiago de Cuba, de donde ella era originaria.
La Habana anunció que se podrá "rendir homenaje de reconocimiento y cariño" a Espín en el Memorial José Martí de la Plaza de la Revolución, en la capital cubana, y en la base del monumento al héroe de la independencia Antonio Maceo, en Santiago de Cuba.
También se hace énfasis en su participación sobresaliente en el movimiento guerrillero contra el gobierno de Fulgencio Batista, y que tras el triunfo de la revolución en 1959 "encabezó la unificación de las organizaciones femeninas y la constitución de la Federación de Mujeres Cubanas".