El mandatario Martín Torrijos calificó como "poco afortunadas" las excusas de sus antecesores y opositores sobre la poca atención que le dispensaron al problema de la pobreza.
La pobreza en Panamá "no es un problema de votos, sino un deber social", que como gobierno "estamos atendiendo", dijo Torrijos durante la celebración de la consulta del PRODEC ayer, en Río de Jesús, Veraguas.
Cuestionó que el 10% de la población que tiene mayores recursos controle el 60% de los ingresos del país, sin siquiera voltear su mirada hacia los más necesitados.
Torrijos anunció en Calobre la firma de un acuerdo con la Unión Europea para un proyecto que beneficiará a 360 comunidades.