El gobierno cubano liberó por motivos de salud a dos disidentes más de los 75 que fueron encarcelados el año pasado, con lo que suman cuatro los excarcelados de ese grupo en los últimos meses.
"Esto me cogió muy de sorpresa, creo que quieren dar un gesto de buena voluntad, espero que liberen a todos los hermanos presos por causas políticas", dijo en su casa el activista de derechos humanos Orlando Fundora, pocas horas después de ser liberado.
Además de Fundora, fue excarcelado también en las primeras horas del viernes el sindicalista independiente Carmelo Díaz, de 67 años. Ambos tenían serios problemas cardiacos y estaban hospitalizados en un centro médico para reclusos en La Habana.
"El gobierno está liberándolos para que no mueran en prisión, están muy delicados", dijo el activista Elizardo Sánchez.