Faltaba poco para las seis de la tarde, cuando íbamos camino al estudio de La Cáscara. No me sentía motivada, aunque fuera el futuro presidente a quien entrevistaría por aproximarse el Día del Padre. Pensé que todo sería un acto fingido... pues me dije, "él tratará de parecer, el mejor padre del universo".
Llegamos y aunque no nos esperaban nos acomodamos... tiempo más tarde llegó, junto a sus tres hijos Daniela, Martín y el pequeño Nicolás, al que todos llaman Spiderman.
La Cáscara había preparado una serie de preguntas para su segmento "In The House", mientras yo trataba de escuchar y estar atenta a cada movimiento.
En aquel momento pude definir a la familia Torrijos. Su hija mayor Daniela, aunque es una niña discapacitada, es la más hablantina, lo hacía muy bien, y apoya a su padre en todo. Martín, el segundo, es un poco penoso, pero atento, además fanático del equipo de España igual que su padre. El último, Nicolás muere por tener un papá súper héroe, y es fanático de Spiderman.
Aunque haya cambiado de opinión con tanta facilidad, me gustó esta familia, Martín Torrijos es un padre especial, se le notaba en sus ojos, el amor por sus hijos, mientras trataba de contestar, el pequeño Niko "Spiderman", se le colgaba del cuello.
"Siempre saco tiempo para compartir con mis hijos, y tal vez no sea en cantidad, pero sí en calidad -a pesar de que se quejan, por el uso del celular-. Trato de compaginar mis actividades políticas con las de padre. Ver cómo crecen mis hijos, y cómo cada cual tiene sus propias características, es lo mejor de ser padre", confesó al terminar con una suave sonrisa, mientras Niko, lo halaba por el brazo.