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Niños Congos en las oficinas de Crítica  |
Bailes, aplausos, risas y algunas expresiones de admiración fue lo que se vivió en días pasados en las instalaciones de Crítica, cuando algunos niños motivados por el baile congo al ritmo de la tradicional música bailaban entre ellos y luego con algunas personas del personal de este empresa, actividad que nos alegró y hasta desestresó.
Era sorprendente ver los movimientos que niños de tan poca edad podían realizar de manera tan atractiva y singular, por lo que no faltaron los halagos para estos niños.
Los niños que bailan congo se sienten entusiasmados por este baile, y se inclinaron por éste porque lo vieron en otras personas que integran su familia. Algunos tienen varios meses de estar bailando, otros a pesar de que se han iniciado hace poco tienen el ritmo de este baile muy definido. Tania Aizprúa nos comentó que tiene tres años bailando y fue elegida como reina, ya que los movimientos que tiene son impresionantes.
Juan Carlos Cuello tiene aproximadamente cuatro meses de estar instruyendo a los niños. Ha formado un grupo folklórico llamado "Dios y mis raíces", bajo su propia dirección. El dice que los niños están motivados por los diferentes bailes que se les enseñan, por lo que se hace necesario rescatar las raíces de los antepasados a través de las generaciones que vienen desarrollándose.
Se motiva por realizar este tipo de actividad con niños, ya que de niño él no pudo realizar esto. Su sobrino lo impulsó para que lo realizara y en la actualidad trabaja con veinticinco niños. Ellos no tienen que pagar absolutamente nada, practican todos los sábados y es tanta la motivación que ellos inventan prácticas los días de semana.
El mensaje que los niños brindan es que es bueno sentir atracción hacia los bailes de Panamá, ya que de esta manera se pueden distraer de una forma sana, y se evita caer en malos vicios. |