Para muchos es un "perro". Su habilidad para seguir y arrestar a cazadores está comprobada con más de 18 años de servicios. Se trata del sargento primero Roberto González, integrante de la Policía Ecológica.
Como él dice: "las pisadas, las fogatas y las trampas que utilizan los cazadores son más que suficientes para que el sargento González los pueda seguir y capturar".
González es uno de los 50 uniformados bajo el mando de la capitana Iveth González, quienes conforman la Policía Ecológica fundada desde hace más de 25 años.
La entidad totalmente policial es un brazo de la Policía Nacional y está ubicada en Gamboa, antigua Zona del Canal.
Entre las prioridades de la Policía Ecológica se encuentra proteger más de 19 mil hectárea, las cuales componen el Parque Nacional Soberanía, ubicado entre las provincias de Panamá y Colón.
LOS CAZADORES
La mayoría de los cazadores provienen de la zona de amortiguamiento o los pueblos aledaños al Parque Nacional Soberanía. Entre ellos se puede mencionar, Alfagia, Las Palmitas, Chilibre, Limón, Frigolito y La Gloria.
Para cazar utilizan rifles o escopetas, todas con el cañón modificado y hasta una lámpara que inclusive anexan arriba de la mira.
Estos depredadores salen en pequeños grupos y a veces hasta solos. Llevan una mochila, en cuyo interior guardan hamaca, cuchillo, machete, martillo, bote, clavos y olla.
A los rifles y escopetas les cambian los balines de los cartuchos, por plomo, a eso le llaman "tiro calzado"; un impacto con ese tipo de bala es mortífero.
Los más consagrados en este deporte sangriento e inhumano, cargan con ellos cocina y gas para realizar sus fogatas.
Saben a la perfección que las leyes permiten la caza de coto o área donde se puede cazar.
Hay dos tipos de caza: la mayor que consiste en atrapar animales como venado, saíno y conejo pintado; en la caza menor entran todos los animales de menor tamaño.
Cada vez que se mata un animal los daños que se ocasionan al ecosistema son grandes, pues se altera el orden de la naturaleza.
APRESADOS
Una vez detenidos, los cazadores aseguran desconocer que la caza es un delito, contemplado en la Constitución.
Es la primera vez que realizan algo como eso, que no lo volverán a hacer, pero a los tres días están de nuevo en el bosque.
LAS TACTICAS
Seleccionar el punto donde cruzan los animales, es el primer paso que realiza el cazador. Luego utiliza la trampa de "mal puestas", consiste en colocar sobre dos árboles una madera horizontal donde el cazador se sienta y apuntando con el rifle espera a que la presa llegue a comer, para luego matarla.
Otra de las trampas es cebar, al animal: colocarle el alimento siempre en el mismo punto para que éste se acostumbre a comer siempre allí. Estas tácticas se combinan.
LOS ANIMALES
Entre los animales favoritos de los cazadores se encuentran el conejo pintado, venado, saíno, ñeque, torcaza, gato solo y otros. La libra de carne de estos animales oscila entre B/.2.00 a B/.3.00.
Es un negocio redondo porque si el cazador tiene 60 libras de cualquiera de los animales mencionados tiene más de B/.60.00 ganados.
REGULACION
La Ley 24 del 7 de junio de 1995 que entró a regir a partir del 2004, mejor conocida como Ley de la vida silvestre, regula la caza en el país.
PROTECCION
Desde los tratados Torrijos Carter, en septiembre de 1977, se contempló que la Policía debe salvaguardar los bosques.
En 1985 la ley 20 bajo el mando del General Manuel Antonio Noriega la acoge y denomina a los uniformados que realizan ese trabajo Guarda Forestal y diez años después se designó como en la actualidad: Policía Ecológica.