La estomatitis vesicular es una enfermedad viral que se caracteriza por una respuesta febril acompañada de vesículas en las membranas mucosas, orales, epitelio de la lengua, la ubre, las plantas de los pies, el rodete coronario y a veces en otras partes del cuerpo.
El ganado bovino, los cerdos, los equinos, ovejas y caprinos son las especies con mayor sensibilidad y esta puede afectar al hombre determinada por un estado griposo.
SINTOMAS
Sus manifestaciones clínicas son claras y fáciles de identificar, ya que con llagas en la boca, patas y ubres, así como una depresión del animal por su estado febril puede el ganadero estar frente a esta enfermedad. Sólo el diagnóstico laboratorial definirá si es Estomatitis y bajo un método diferencial se podrá indicar si es tipo Indiana o New Jersey. En países donde existe la Exantema vesicular del cerdo, la enfermedad vesicular del cerdo y la Fiebre aftosa, podrá ser confundida con estas, es por eso que su cuidado debe ser una prioridad en cualquier explotación ganadera, ya que la difusión de estas enfermedades puede repercutir rápidamente.
ES CONTAGIOSA
La estomatitis vesicular no es tan contagiosa como la Fiebre aftosa, no obstante causa grandes pérdidas a la producción en los animales por su afectación directa en algunas partes del cuerpo que son vital para el mecanismo de alimentación y desarrollo de sus actividades. El virus puede diseminarse en un rebaño hasta un 90% en los animales, y estos muestran signos clínicos, desarrollando prácticamente anticuerpos. Este es rico en líquido vesicular claro y la cubierta vesicular; es más infeccioso en el momento que las vesículas se rompen o poco después, no obstante 5 ó 6 días después estas lesiones pueden resultar inocuas.