El seleccionador alemán, Jürgen Klinsmann, cuenta con la reaparición de su capitán Michael Ballack en el partido del próximo miércoles contra Polonia en Dortmund, lo que implicará al menos un cambio con respecto a la alineación que jugó contra Costa Rica.
"Michael Ballack volverá a estar en el equipo contra Polonia y eso cambiará algunas cosas", dijo ayer Klinsmann.
Luego, al ser interrogado acerca de si estaba completamente seguro de poder contar con Ballack, Klinsmann precisó que la recuperación del jugador, que se perdió el partido inaugural por una lesión en el gemelo derecho, es "óptima" y que, según el médico Hans-Wilhelm Müller-Wohlfahrt, podrá entrenar mañana con el equipo.
Ayer Ballack estuvo haciendo bicicleta estática y luego corriendo mientras que otros jugadores se dedicaron a jugar tenis o baloncesto debido a que Klinsmann decidió que era conveniente "despejar un poco la cabeza" antes de empezar la recta final de la preparación del duelo contra los polacos.
El otro caso que generó alguna preocupación entre los alemanes, el del guardameta Jens Lehmann que se torció un tobillo en el partido contra Costa Rica, parece estar definitivamente solucionado.
La satisfacción por haber empezado el torneo con una victoria, y con cuatro goles marcados, no parece hacer que los alemanes pierda de vista que su principal reto en el partido contra Polonia, el miércoles, es mejorar el comportamiento defensivo. Ahora eso quieren.