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A RAIZ DEL DESAFUERO
Defensa de Pinochet usará salud y supuesta inocencia en apelación
Agencias
Internacionales
La defensa del general Augusto Pinochet dijo ayer que apelará al desafuero del senador vitalicio con la alegación de que es inocente de los cargos de secuestro y que su deteriorada salud no le permite tener un debido proceso. Ricardo Rivadeneira, uno de los juristas que defiende al ex dictador, dijo ayer que insistirán ante la Corte Suprema "que el senador Pinochet es absolutamente inocente de los cargos que se le imputan". En la apelación, que entregarán el viernes ante el máximo tribunal, los juristas agregarán que la salud del veterano general no le permite instruir a sus abogados en esta etapa del proceso, lo que lo deja al margen de un debido proceso. Los defensores de Pinochet se abstuvieron en la víspera de acudir a los tribunales de justicia donde la Corte de Apelaciones resolvió por 13 a 9 votos que "hay fundadas sospechas" para creer en la participación del ex dictador en los crímenes de secuestro que se le imputan. Rivadeneira, en tanto, encontró "débil" el dictamen de los magistrados que despojaron al general de su inmunidad de senador vitalicio, que en la práctica también lo suspende de su cargo parlamentario. El equipo jurídico del senador, que incluye a dos ex ministros de relaciones exteriores que lo defendieron en Londres, aprovechará los argumentos de la minoría de 9 jueces que se opusieron al desafuero. El fallo de minoría que afirmó que no hay hechos suficientes para estimar la participación de Pinochet como autor-inductor del secuestro de 19 opositores en 1973 y que debió haber sido examinado médicamente antes del pronunciamiento. Esos serán los argumentos que sus defensores utilizarán ante la Corte Suprema, según han anticipado. Incluso uno de los ministros, Cornelio Villarroel, dijo en una prevención de su voto que la salud del general no permite que se siga un juicio en su contra sin pasar a llevar las garantías mínimas establecidas por el Pacto de San José de Costa Rica. El mismo Rivadeneira dijo durante los alegatos del proceso de desafuero, en abril, que Pinochet está aislado por sus médicos, que él mismo no había tenido acceso directo al ex dictador, mientras su colega Pablo Rodríguez agregó que no está en condiciones de dar instrucciones. Los nueve jueces que votaron por mantener el fuero de Pinochet recordaron que Pinochet fue liberado de su arresto domiciliario de 503 días en Londres a causa de su mala salud física y por "un deterioro moderado/grave de su función intelectual, que supera al que provocaría su edad". El dictamen de los especialistas británicos que lo examinaron en enero, en Londres, describió claramente síntomas correspondientes a una demencia senil, pero ese argumento no será utilizado -al menos por ahora- por sus abogados porque se oponen sus familiares, las fuerzas armadas, los militares retirados y la oposición derechista. "El general Pinochet no está loquito ni demente", dijo ayer el diputado Pablo Longueira, presidente del mayor partido opositor, la Unión Demócrata Independiente". El único eximente contemplado por la ley chilena para eludir un juicio es "la demencia o locura", que por tratarse de una legislación muy antigua, no entra en detalles sobre problemas como la demencia senil.
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