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CREO SER UN BUEN
CIUDADANO
Sin embargo, soy racista en un país que es crisol de razas
Parece absurdo, pero así es: los panameños son racistas. Da hasta risa pensarlo. Aquí, donde nadie puede jactarse de la pureza de su raza, porque la mayoría son resultado de una intensa mezcla de colores y culturas. Pero así es. Discriminamos a los demás por el color de su piel, por la textura de su cabello, y por la apariencia de su cuerpo y rostro. No medimos su capacidad intelectual, o su devoción al trabajo, o su rendimiento social. Importa cómo se ve, cómo habla y de qué región social viene. Eso limita las oportunidades de trabajo y estudio, y hasta frustra las relaciones social. No debe ser así aquí, en un país bendecido por la multiplicidad de culturas.
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