Los prisioneros de las cárceles de Corea del Sur gozarán de un permiso especial para observar el Mundial por televisión.
"Aunque nuestras reclusas de edades entre 30 y 40 años no habían estado muy interesados, a medida que el Mundial se aproximaba cambiaron de parecer", dijo un portavoz de una cárcel de mujeres. |