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Milciades Ortíz
Faltando pocas horas para
las elecciones, circulé por varias calles de la barriada Panamá
La Vieja. Lo primero que me llamó la atención fue que las
vías están asfaltadas, sin huecos. Realmente tenía
años de no visitar el sitio y pude captar su desarrollo vial.
"Ya era tiempo que arreglaran estas calles", pensé satisfecho
por ver el mejoramiento urbanístico de esas populosa barriada.
El sitio estaba lleno de propaganda política. Me interesó
ver letreros que decían que "esta obra fue realizada por el
Honorable Legislador...". Se trataba de un modesto campo de juegos,
que por cierto estaba abarrotado de jóvenes esa tarde.
Aquí molestó mi alma confirmar lo que muchos panameños
critican: las famosas partidas circuitales de los Legisladores (y Representantes),
están siendo utilizadas como propaganda política de ellos
mismos.
Ese dinero de las "circuitales" sale del bolsillo de todos
los panameños y no del Honorable. Entonces, esa obra no es realizada
por el bendito Honorable, sino por todos los panameños que la pagamos
con nuestros impuestos. Por eso, si alguien tiene mérito debe ser
este pueblo, que destina sus impuestos para obras de mejoramiento comunitario.
A cada rato veo en los periódicos y TV a Honorables apareciendo
rodeados de personas, al entregar "una donación". Claro
que esto es propaganda para ese político. Lo que nunca se aclara
es que el dinero de la donación no es del Honorable (de su sueldo),
sino de los impuestos de todos nosotros.
Así que una de las cosas que debe reformar el nuevo gobierno
es lo de las partidas circuitales. Creo que hay suficientes instituciones
encargadas del desarrollo comunitario, que muy bien pueden manejar ese dinero.
Así no sería usado el dinero del pueblo para propaganda de
tal o cual político.
Lo único que deben hacer los Honorables Legisladores y Representantes,
es promover sugerir, proyectos de desarrollo de sus comunidades. Y nada
de que un político se retrate o ponga letreros a su favor en una
obra hecha con la plata de todos nosotros.
Otra cosa que me permito sugerir es que se busque la manera de cambiar
la forma de votar en las elecciones. No creo que es justo ni democrático,
votar solamente por gente de un partido. He dicho hasta el cansancio, que
personas buenas, honestas y trabajadoras hay en todos los partidos políticos.
Votar por solamente gente de un partido, no es correcto.
Sugiero que, por ejemplo, la lista para Representantes y Legisladores
se haga en orden alfabético y no por partido. Así cada elector
escogerá a quienes considere más capaces, no importa a qué
grupo político pertenezca.
También pienso que debe buscarse mecanismos legales que permitan
la existencia de candidatos independientes. Las numerosas trabas que hay
actualmente en la ley electoral, en realidad impiden la participación
de personas que no estén en algún partido político.
Se debe recordar que la mayoría de los votantes no pertenece
a partidos políticos. Por lo tanto, un número enorme de panameños
con deseos de ser candidatos, no pueden ir de manera independiente, por
los numerosos requisitos que tiene la actual ley electoral. Esto no es justo
ni democrático. Tenemos suficiente tiempo para reformar la Ley de
elecciones, para mejorarla en varios sentidos, incluyendo el de los independientes.
Me han comentado varias personas, en forma negativa, eso de darle millones
de dólares (balboas) a los partidos políticos. Se puede alegar
que así se ayuda a los partidos pobres. Sin embargo, algunos panameños
piensan que esos millones podrían servir para solucionar problemas
serios del país. Estoy seguro que los líos del Santo Tomás
se arreglarían con el dinero que se dio ahora a los partidos, para
que ellos logren el poder y disfruten de todos los privilegios que da el
estar "en la papa".
Finalmente una pregunta necia: ¿A quien debe responder un Honorable:
a su partido o a la gente que lo eligió?
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