Utilizó las técnicas al óleo, tempera, y pintura de aceite. Su habilidad artística se puede apreciar a través de casi 100 cuadros, que pintó a sus compañeros y a personas de la comunidad.
Todos estos cuadros son notables por el brillo y colorido, la energía del dibujo, el atrevimiento en la pintura de figuras humanas y la fuerza de su imaginación.
Ha pintado paisajes naturales, folclóricos, animales, retratos, figuras humanas, desnudos y cuadros religiosos.
Las pinturas de su cosecha que el señor Florencio Milock considera ilustres son: La Última Cena, la Junta de Embarra Campestre y una pintura en tela del Cristo Negro de Portobelo.