Presión alta, diabetes, niveles altos de colesterol, obesidad, el tabaquismo, la vida sedentaria, entre otros factores, son las principales causas de padecer un ataque cerebrovascular.
Esta enfermedad que es más común en las personas mayores de 60 años, es causada cuando un coágulo bloquea o impide el flujo de la sangre al cerebro y por lo tanto, el paso de oxígeno y nutrientes, explicó el neurólogo Aron Benzadon.
Según el especialista sin oxígeno, ni nutriente, las células nerviosas en el cerebro mueren rápidamente. Cuando esto pasa, la parte del cuerpo que estas células nerviosas controlan, deja de funcionar adecuadamente. Los efectos pueden ser permanentes, por lo que es muy importante actuar rápidamente para ayudar a minimizar la discapacidad física o mental a largo plazo.
SINTOMAS
Entumecimiento o debilidad de la cara, brazos o piernas, en especial, de un solo lado del cuerpo de aparición súbita.
Confusión, trastorno del habla o de la comprensión de aparición súbita.
Trastornos de la visión en uno o ambos ojos.
Trastornos de la marcha, vértigos, mareos, falta de equilibrio o de coordinación.
Dolores de cabeza sin causa conocida de aparición súbita.
Problemas para pensar, aprender o recordar.
Fatiga.
Cambios de humor.
Algunas veces los síntomas son leves o se dan por un período corto de tiempo, (ejemplo: minutos), éste es conocido como un ataque isquémico transitorio o un mini ataque, comentó el neurólogo Aron Benzadon.
CUIDADOS
El paciente inicialmente debe empezar a tomar medicamentos, los hay para prevenir la recurrencia, principalmente los que actúan a nivel de las plaquetas que se llaman antiplaquetarios, por otra parte el estilo de vida debe cambiar. Tener una alimentación más sana, hacer ejercicios, disminuir la ingesta de grasa, comer bajo de sal, evitar el exceso de azúcar.
- Factores de riesgo controlables.
- Presión sanguínea alta (hipertensión) - incrementa el riesgo de 4 a 6 veces, pero es tratable si se detecta y trata con un antihipertensivo12.
- Historia de enfermedad cardiaca, incluyendo arritmia. Puede ser tratada y manejada con medicamentos y seguida de un estilo de vida saludable.
- Historia de infarto cardiaco: 8% de los hombres y 11% de las mujeres sufren de un ataque en los 6 primeros años después de un infarto cardiaco17. Sin embargo, el riesgo a futuro se puede disminuir con el manejo adecuado.
RIESGOS NO CONTROLABLES
Edad - dos tercios de los ataques se dan en personas mayores de 65 años, y el riesgo se duplica con cada década por encima de los 55 años.
Sexo - mayor riesgo en los hombres que en las mujeres.
Raza - los pacientes de raza negra tienen mayor riesgo que otros grupos étnicos.