Cuando un hombre y una mujer mantienen relaciones sexuales, lo hacen por el simple gusto que viene después de unas caricias y besos apasionados.
La mujer, por lo general, tiene mayor conocimiento sobre los beneficios que produce el mantenerse activo sexualmente, y es que aunque parezca mentira, ellos se preocupan por una buena erección, una entrega satisfactoria y que su chica consiga uno o varios orgasmos.
Bueno, el punto es que practicar el coito fortalece no sólo las defensas, sino que también ayuda a quemar calorías, como se ha mencionado en otras ocasiones.
Y es que el deseo sexual provoca que el organismo libere una mayor cantidad de hormonas como testosterona, estrógenos y adrenalina, que ayudan a elevar la producción de células inmunológicas que actúan contra los gérmenes, las sustancias tóxicas del ambiente y las alteraciones de las células.
Claro está, el corazón también se ve beneficiado, sobre todo cuando se llega al clímax sexual, que es el momento justo en donde se liberan las endorfinas, como quien dice, las hormonas del placer que ayudan a relajar las venas, arterias y vasos sanguíneos, lo que facilita la circulación de la sangre.
En otro aspecto, si nos vamos al aspecto físico, también ayuda a tonificar los músculos de las piernas y los glúteos. Tenga sexo casi a diario durante un mes, empezará a notar resultados.
¡Ah! también es muy común escuchar sobre las bondades que brinda el sexo a la piel y al cabello, éste último se nota con más brillo y la piel tiende a ponerse más tersa de lo normal. Esto, según expertos en el tema, obedece a la sencilla razón de que cuando las hormonas sexuales se estimulan, las glándulas sudoríparas segregan más agua y aceites naturales, ayudando a hidratar y proteger la piel.
Al final, el tener sexo placentero se nota en la alegría y vitalidad tanto del hombre como de la mujer.