La obesidad que tanto afecta a los estadounidenses también es un problema de la ciudad de Panamá. Sólo vea la cantidad de personas gordas en las calles. Esto es producto de la alimentación desordenada que tenemos.
Muchos saben que están en sobrepeso, pero no saben cual es la forma más sana y segura para bajar de peso. Por eso, muchos se comen los cuentos que ven en los medios de comunicación, que prometen resultados milagrosos en tiempo récord.
Cuando vamos tras una estrategia para "vernos bien" por la razón que sea, ponemos atención generalmente en todo aquello que nos ofrezca lucir delgados. Tenemos para escoger entre los productos que nos ilusionan por instantes cuando después de aplicarlos la cinta métrica marca 1 pulgada menos, las cremas de toronja, las fajas de yeso, las píldoras de nopal, los jugos dietéticos, la dieta de la bebida milagrosa o la de temporal, las que fácilmente se ven dentro de revistas juveniles y un largo etc.
Tú y yo sabemos que de esto abunda en el mercado. ¿Pero es el peso en realidad de lo que nos queremos deshacer o son aquellas llantitas los que nos quitan el sueño?
Es más sencillo estar delgado (y que esa grasita acumulada alrededor del abdomen, glúteos, brazos o las piernas permanezca aún después de haber perdido 8kg); que lucir verdaderamente saludable y con envidiable figura. ¡Pero a fin de cuentas es esto lo que buscamos! por tanto, debemos poner especial atención en que ese peso que nos quitemos de encima sea por eliminación de grasa y no por pérdida de agua y músculos.
Vivimos constantemente preocupados por la cantidad de grasa presente en nuestro cuerpo y aunque, es por todos sabido que debemos eliminarla de nuestra dieta, no es el único factor a contemplar cuando buscamos tener un cuerpo estético: con muy poca grasa, glúteos y piernas con volumen, tono y forma en brazos, abdomen y espalda, pero sin perjudicar nuestra salud; Es necesario abarcar por lo menos cuatro aspectos: dieta, entrenamiento, descanso y una adecuada suplementación y complementación.