Antes de abandonar el Kremlin y encabezar el Gobierno de Rusia, Vladimir Putin presentó al Parlamento un proyecto de ley que colocará la abogacía bajo el control del Estado y privará de inmunidad a los letrados, según revela la prensa rusa.
De acuerdo con el borrador, la ley autorizará los funcionarios a pedir que la Justicia suspenda la licencia de un abogado y a interrogar a los letrados sobre cualquier asunto relacionado con la defensa de sus clientes, informó el diario de negocios RBC Daily.
El Kremlin emprendió el primer intento de someter a la abogacía al control estatal en 2006, cuando la Duma o Cámara de Diputados aprobó en primera lectura una polémica ley, pero después tuvo que aparcarla debido al rechazo de la judicatura y la prensa liberal.
Ahora, fue personalmente Putin quien presentó una serie de enmiendas a la "Ley de la abogacía" y la envió a la Duma en el último día de su mandato en el Kremlin, justo antes de ceder ayer la jefatura de Estado al nuevo presidente ruso, Dmitri Medvédev.
Según el diario, las enmiendas autorizan al Servicio Federal de Registros (SFR) a reclamar a los abogados cualquier documentación y explicaciones relativas a la defensa de sus clientes.
Además, el SFR estará apoderado para exigir la celebración de un congreso extraordinario de los abogados, mientras sus filiales territoriales podrán pedir a los tribunales que suspendan la licencia de un letrado.