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El secretario de Estado norteamericano, Colin Powell, exigió ayer en Siria y Líbano neutralizar al brazo armado del grupo chií libanés Partido de Dios (Hizbulá) y a varios grupos extremistas palestinos con el fin de acelerar la aplicación del plan de paz para Oriente Medio conocido como "Hoja de Ruta".
En una conferencia de prensa en Beirut antes de concluir una visita en Siria y Líbano, Powell afirmó que las autoridades sirias le aseguraron que han cerrado algunas oficinas en Damasco de grupos antiisraelíes.
"Se comprometieron a cooperar y esperamos que continúen haciéndolo", dijo el jefe de la diplomacia de EEUU tras reunirse con el presidente libanés, Emile Lahud, a las pocas horas de haberse visto en Damasco con el sirio, Bachar al Asad.
Powell señaló que había analizado con los dos líderes árabes la situación en la zona tras el derrocamiento en Irak de Saddam Hussein, y dijo que trató con Asad "muchos asuntos, incluida la continuidad del cierre de la frontera con Irak y el asunto de las armas" de destrucción masiva. Varios responsables estadounidenses han acusado en las últimas semanas a Siria de esconder armas iraquíes de destrucción masiva, acoger dirigentes del régimen depuesto y suministrarle material militar durante la guerra en Irak.
"Deseamos establecer una atmósfera de paz en la región y alcanzar una solución global que respete los intereses de Siria y Líbano", afirmó Powell. También indicó que había destacado ante Lahud la importancia de que el Ejército libanés se despliegue en la frontera con Israel, en lugar de la guerrilla de Hizbulá. |
