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Arsenal de armas y explosivos en cárcel Modelo de Bogotá
Bogotá
AP
Un impresionante arsenal de armas y explosivos encontró la policía en el allanamiento tras ingresar a la cárcel Modelo de Bogotá el sábado, luego del más sangriento enfrentamiento en la historia penitenciaria de Colombia con la muerte de 26 reclusos. El general Alfonso Arellano, director de operaciones de la policía, dijo ayer a la AP que se encontraron siete cargas de dinamita listas para explotar, dos fusiles AK-47, una escopeta de dos calibres, 16 pistolas, diez revólveres, 5.000 cartuchos, ocho granadas y cuatro kilos de explosivos de alto poder, además de equipos de comunicación, en una operación en la que participaron unos 2.000 hombres. Efectivos del ejército, la policía y la guardia penitenciaria, respaldados por helicópteros militares, allanaron la cárcel después que el jueves se iniciara un motín por el asesinato de un dirigente paramilitar por parte de delincuentes comunes acusados de homicidios, secuestros y extorsiones. Los paramilitares respondieron atacando con explosivos y armas automáticas y cortas, y dieron muerte a 26 presos, en tanto que 16 resultaron heridos. Los guerrilleros presos, alrededor de 400, no participaron en la batalla, pues mantienen un pacto de no agresión con sus enemigos paramilitares. Los constantes incidentes de homicidios, fugas y todo tipo de actos de corrupción en los hacinados penales colombianos hicieron que el gobierno del presidente Andrés Pastrana decretara una 'emergencia carcelaria' el 16 de febrero, día en que se posesionó el tercer director que tenga el Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (INPEC) en los últimos 19 meses. La emergencia permite despedir a guardias de las prisiones, sin un proceso disciplinario previo, así como aumentar el presupuesto destinado a las 168 prisiones del país. Desde la emergencia, 110 guardianes han sido suspendidos y se espera su remoción definitiva.
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Efectivos del ejército, la policía y la guardia penitenciaria, respaldados por helicópteros militares, allanaron la cárcel después que el jueves se iniciara un motín por el asesinato de un dirigente paramilitar por parte de delincuentes comunes acusados de homicidios, secuestros y extorsiones.
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