El mundo enfrenta una crisis en la producción de alimentos. Hasta en la mayor potencia del mundo: Estados Unidos se está racionando la venta de arroz a los consumidores.
El problema de las filas para adquirir arroz "Compita" a precios accesibles no es problema sólo de los panameños. En Venezuela que nada en petrodólares hay también escasez de productos de la canasta básica.
El hecho ya levanta preocupación a nivel regional al punto que los ministros de Agricultura de Centroamérica -incluidos Panamá- aprobaron una estrategia que privilegia la producción de granos básicos como maíz, arroz y frijoles.
Ahora se habla de la seguridad alimentaria. Cuando se disparan los costos de producción a causa del petróleo y se teme una hambruna mundial, los países ya no creen tanto en las importaciones y quieren volver al campo. De qué vale tanta riqueza, si los pueblos no tienen qué comer.
Los del arroz es una campanada de alerta. Aunque hoy se consigue variedades que van desde 30 centésimos a 55 centésimos la libra, existen temores en torno a la futura producción de un cereal que en Panamá registra un consuma per cápita anual de 183 libras.
El arroz es el alimento básico de 3,000 millones de personas en el planeta. Hay problemas de producción, debido al alto costo de producción, las inundaciones y el uso de terrenos antes destinados a la producción de granos, que ahora son explotados para los biocombustibles.
La falta de alimentos en el mundo, puede generar una hambruna y estallidos sociales en todos los continentes. Frente a ello no hay que olvidar el campo, sino que se debe fortalecer la producción nacional y así garantizar la comida de los nacionales.