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Jacques Chirac, favorito en las encuestas.  |
La confusión reina en la recta final para la primera vuelta de las elecciones presidenciales francesas, con un electorado volátil, atomizado e imprevisible y con tantos indecisos que los institutos demoscópicos andan a tiendas.
Con unos 40 millones de votantes llamados a las urnas en el primer asalto del próximo domingo y en la segunda y definitiva vuelta del 5 de mayo, el porcentaje de indecisos oscila entre el 20 y el 40 por ciento, y la abstención podría rondar un 30 por ciento.
El avance de los "pequeños" candidatos y el retroceso de los dos principales contendientes y previsibles protagonistas del duelo final, el actual presidente y neogaullista Jacques Chirac y el primer ministro saliente y candidato socialista Lionel Jospin. En la encuesta divulgada ayer, Jospin está a su nivel más bajo: sólo un 16,5 por ciento en la primera vuelta, frente al 20 por ciento de Chirac. |