Los estudiantes, administrativos y docentes de la Universidad de Panamá ya no aguantan más.
¿La razón? Al igual que el resto de la sociedad, pasan por un problema de inseguridad que ya ha colmado la paciencia de los universitarios.
Los robos, principalmente en horas de la noche, se están haciendo más que cotidianos.
En días recientes, varios estudiantes de ambos sexos han sido objeto de asaltos cuando se dirigen a tomar el autobús después de asistir a sus clases.
Estos estudiantes fueron amenazados por sujetos que, con armas blancas, los despojaron de dinero, celulares y prendas.
Los sitios donde están actuando estos delincuentes son principalmente las paradas de autobuses, pero no se han limitado a estos sitios, han penetrado incluso las instalaciones de la alta casa de estudios.
No son pocos los que han denunciado robos dentro de los vehículos. En años anteriores, los asaltos y las agresiones se han registrado hasta dentro de los salones de clase. La familia universitaria solicita mayor vigilancia en sus predios.
SITIOS PELIGROSOS EN EL CAMPUS
Las paradas en los predios del campus central y en las cercanías de Viejo Veranillo son los sitios donde suelen darse los atracos.
