Con el sueño de una luchadora mujer interiorana nació el gustado "pan de La Arena" que se ha convertido en uno de los bocadillos más deseados de los propios y visitantes que no pueden pasar por este pueblo, sin llevar una bolsita para compartir con familiares.
Y es que la avenida principal del "portal de Chitré" como se le conoce a La Arena está impregnado del olor de esta peculiar receta que fue pedida a Dios a través de un sueño por la señora Eudocia Ávila de Santana, para ganarse la vida y sacar adelante a sus hijos. Ángela de Rodríguez, hija de doña Eudocia, dijo que gracias a este pan salieron de la extrema pobreza en que vivían.