Los severos golpes que recibió una joven, por parte de su marido en Olá, fueron suficientes para llevarla a la muerte y dejar tres hijos en la orfandad. Ahora el marido agresor pagará por este homicidio, mientras que los familiares siguen pidiendo justicia.
Ebustina Gómez, de 21 años, fue golpeada el pasado 28 de marzo con unas piedras en la cabeza, en un río cercano a la casa en Burrica de Olá. Los golpes fueron tan severos, que no resistió y murió ayer en horas de la tarde en el Hospital Santo Tomás.
Lo que comenzó como un caso de violencia doméstica hace unos 8 años, terminó con el homicidio de una buena mujer que temía a la actitud violenta del sujeto que la celaba por cualquier cosa.
Ebustina tuvo una fuerte discusión con su marido el pasado 28 de marzo cerca del río, donde la golpeó con unas piedras hasta dejarla inconsciente. Ella fue recluida en el Hospital Santo Tomás y nunca salió de su estado de coma. Los golpes en el rostro y la cabeza eran muy fuertes, y sus probabilidades de vida eran nulas.
Los familiares de la joven no salen del asombro y piden justicia; mientras que el Personero de Olá ordenó la captura del agresor Wilfredo Ortega, de 22 años. La Policía Técnica Judicial viajó hasta la comunidad, para detenerlo por el homicidio.
